“Cuando conocimos a la fisioterapeuta Maria Tovar, para nosotros fue como un rayo de luz en las tinieblas de la enfermedad de Carmen, luego a lo largo del tratamiento descubrimos otras de sus virtudes que la hacen ser una gran fisio, su desbordante humanidad, su forma tan cariñosa de tratar a los pacientes, y sin embargo no carente de autoridad, energía y actitud para la terapia además de su profesionalidad, su enorme profesionalidad”